Volverse Inteligente es Fácil - Una visión general
Volverse Inteligente es Fácil - Una visión general
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Sin embargo, aparentemente los individuos muy inteligentes seguirían aprendiendo durante toda su vida, principalmente conveniente a que tienen una curiosidad muy superior a la media.
En definitiva, nuestra inteligencia es un constructo difícil formado por una serie de habilidades y talentos que nos permiten adaptarnos al medio de una manera eficaz, garantizando nuestra supervivencia.
Existen muchos tests para determinar cada una de estas variables; pero los más utilizados son el Raven para el factor g, y el WAIS para las habilidades mentales primarias.
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La primera teoría sobre la inteligencia que se desarrolló fue la del “cociente intelectual” o CI. Creada a principios del siglo XX por William Stern, y desarrollada más tarde por Alfred Binet, entendía la inteligencia como la diferencia entres capacidades mentales de una persona y las que en teoría debería tener de acuerdo a su permanencia. Estos dos psicólogos fueron también los primeros en desarrollar un test para determinar el CI.
El cociente intelectual o cociente de inteligencia —abreviado CI; IQ en inglés— es la relación entre la inteligencia de un individuo medida con un test de inteligencia y la inteligencia media cronológica, es opinar, la esperable por su permanencia.[25]
La inteligencia es la tiento que permite la adaptación a nuevas situaciones, el enseñanza de la propia experiencia, la manipulación de conceptos abstractos, el desenvolvimiento en el entorno utilizando el conocimiento adquirido para ello o la resolución de distintos tipos de problemas.
Por eso, durante mucho tiempo se ha creído que la inteligencia se determina al emanar, y que escasamente se puede hacer nulo para cambiarla.
Por su parte, De Zubiría detalla que "estas pruebas de inteligencia surgieron en 1905, por lo tanto se diseñaron con las ideas de ese entonces y hogaño la inteligencia analítica es distinta a la que creíamos un siglo atrás".
Los humanos poseen un nivel de inteligencia particularmente renovador y complejo, pero otras especies también muestran diversas formas de inteligencia, como lo han corroborado varios estudios durante los últimos dos siglos. Por lo que la inteligencia no es una cualidad exclusiva de los seres humanos.
En el entorno de la Teoría de la evolución, para que cualquier rasgo o característica se mantenga y se desarrolle ha de otorgar alguna preeminencia a los individuos que la presentan.
Ahora admisiblemente, lejos del concepto tradicional de inteligencia como un único creador, actualmente se diferencian hasta ocho tipos de inteligencias diferentes; y son una serie de inteligencias interrelacionadas propuestas por el psicólogo Howard Gardner. De esta guisa, Gardner diferencia entre:
La inteligencia A hace relato a su capacidad biologícica de adaptación y expansión a un animación concreto.
Entreambos expertos coinciden en que "la Inteligente inteligencia" racional y deducción medida en las pruebas no es importante en la vida.